“Mis dedos en una máquina de escribir, nunca se han podido conectar con mi cerebro. Mi mano con una pluma sí. Con una pluma fuente, por supuesto. Las plumas normales sólo son buenas para llenar formas en los aviones."
- Graham Greene, novelista, guionista y periodista inglés
To write by writersblock29
Desde que me acuerdo las plumas fuente siempre me han parecido fascinantes. Mi mamá me contaba que cuando ella iba a la primaria, tenían en los escritorios un espacio para poner su tintero para mojar su pluma y escribir.En las películas de época me gustaba ver como escribían usando un pluma de ave y alguna vez intenté hacerlo sin éxito, obvio. Mi papá usa pluma fuente y cuando la tenía que rellenar, era casi casi un ritual. Se sentaba en la mesa del comedor con un pedazo de periódico para no ensuciar nada, su tintero, un trapo y su pluma para rellenarla, también me acuerdo los corajes que hacía cuando se le manchaba una camisa porque se le vaciaba la pluma por traerla en la bolsa.
Ya depués que empecé en esto de escribir las plumas fuentes se me hacían de lo más icónico…. no sé, como un poco romántico el hecho de usar pluma fuente para escribir en lugar de usar una pluma “normal”, siento que le da un plus a algo tan sencillo como escribir. Y es que yo prefiero escribir a mano que hacerlo en computadora, a pesar de los avances tecnológicos, iPods, Blackberries, PDA’s y demás que hacen la vida más sencilla y rápida, a mí eso es algo que no se me da. Yo no puedo vivir sin una agenda, me encanta escoger una padre, que me guste el diseño y que no sea muy grande claro. A mi novio le da un paro masivo y siempre me dice “¡Usa el calendario de tu computadora o de tu iPod!” y yo siempre le contesto “Es que si no lo escribo a mano, siento que no lo escribí.” Raro, ¿no? Aquí también entra otra cosa que me gusta hacer cuando voy de viaje; siempre que llego a algún lugar, compro varias postales, las escribo y se las mando a mis amigos y familiares, sí ya sé que el mail es más rápido, que se puede chatear por mess o hasta tener videochat con skype, pero no sé, es como una tradición, digo, todo mundo recibe e-mails diarios, ¿no es más emocionante que el cartero te traiga una postal y leer lo que te escribe alguien que quieres de su puño y letra desde un lugar lejano? Para mí eso es un arte en peligro de extinción.
También me encanta comprar libretas y cuadernos de notas… rara vez los uso todos, pero simplemente me encantan. Mi favorito actualmente es una Moleskine que me regaló mi novio, estas libretas son superfamosas y hay de todos los estilos que quieras, (creo que aquí en México los venden en el Fondo de Cultura Económica, por si a alguien le intesa) y bueno lo cool de estas libretas es que traen un como sobre al final para guardar cosas y una cinta elástica que se pone alrededor lo cual a mí me encanta porque así no se te cae lo que guardes adentro. En fin, estas libretas son clásicas porque se dice que artistas como Picasso, Matisse o Hemingway las cargaban a todos lados para hacer notas o dibujos.
Pero bueno, ya me desvié un poco del tema. El punto es que hace unos cuantos años decidí comprarme una buena pluma fuente. Pero mi gran problema es que son ¡carísimas! Las más famosas son las de Montblanc, que sí pueden dejar tu economía bastante fracturada, además me daba cosa perderla o algo, así que no me compré nada, hasta que en Office Max empezaron a sacar una línea de papelería de Jordi Labanda, un diseñador supercool que hace unas cosas increíbles y ¡sorpresa! En su colección tenía plumas fuentes, de plástico y que se rellenan con cartuchos en vez de cargarlas con tinta y me costó como $170.00 así que desde entonces, es la pluma que uso diario. Y la verdad es que tienen su encanto, es como una forma de distinguirte y además de que es algo superpersonal porque no se la puedes prestar a nadie, ¿saben porqué? Porque cada quien escribe con una presión diferente y si prestas tu pluma corres el riesgo de que la aprieten mucho y le abran el punto… ¿qué tal?
Esta Navidad no recibí muchos regalos, sólo uno y fue increíble. Mi mamá me regaló un juego de plumas (una fuente y la otra normal) que fueron de mi abuelito al que quise mucho, él era maestro y esas plumas se las regalaron cuando cumplió años como profesor. En la tarjeta mi mamá puso: “Para que escribas cosas bonitas.” Wow, la verdad es que fue el mejor regalo que me han hecho en mucho tiempo, no sólo porque me gustan las plumas, sino porque el valor sentimental la hace invaluable.
Así que si se quieren regresar al pasado y sentirse unas Julietas de la era moderna, compren una pluma fuente (no muy cara obvio) y escríbanle una carta de amor a su Romeo. O simplemente empiecen un diario, o ¡escriban lo que sea! Verán que con una pluma fuente es otra historia.
P.D. Hablando de regalos, el Día de Reyes, América, una lectora superlinda me mandó desde Veracruz una agenda para el 2009. ¡Me leíste la mente Ame! Mil gracias por el superdetallle… ya estoy escribiendo toooooodo lo que tengo que hacer este año… claro con mi pluma fuente.